Este miércoles, Thomas Bach, nuestro presidente del Comité Olímpico Internacional (COI), fue reelecto en una sesión muy distinta a lo acostumbrado, pues de manera virtual se confirmó que seguirá en el cargo para el periodo 2021-2025, una clara señal de la importancia de la continuidad en momentos de apremio como los que enfrentamos debido al Covid-19.
Quienes formamos parte de la Familia Olímpica nacional recibimos con beneplácito esta noticia, pues Thomas Bach, desde siempre, ha demostrado gran simpatía y respeto por el Movimiento Olímpico mexicano y nos ha apoyado en todo momento, por lo que estamos agradecidos con él y su gusto por nuestro deporte.
Durante la 137 sesión del COI, Bach contó con 93 de los 94 votos totales, en un contexto social que nos ha hecho adaptarnos a muchos cambios súbitos para sacar adelante, no solo las competencias deportivas, sino las actividades cotidianas en todos los ámbitos, el mensaje de esperanza prevalece.
El también medallista olímpico en esgrima, quien asumió la presidencia del COI por primera vez en 2013 bajo el lema de la "unidad en la diversidad", ha hecho precisamente del trabajo conjunto con los Comités Olímpicos Nacionales (CON's), una línea que nos invita no solo a mantener el paso, sino aún más, apurarlo.
"El instante es la continuidad del tiempo, pues une el tiempo pasado con el tiempo futuro", dijo Aristóteles. Ahora, esa continuidad de Bach deriva en la unidad que lo mantendrá como líder de la Familia Olímpica mundial y desde México contará con nuestro respaldo para dar seguimiento a las acciones que iniciaron hace varios años y que paulatinamente se verán reflejadas en los Juegos Olímpicos Tokio 2020 y seguramente, todavía más, en París 2024.